Aunque los perros son carnívoros, su alimentación debe ser equilibrada y variada. En otras palabras, también requiere verduras y frutas, y resulta que el pepino es un excelente suplemento dietético para Medor. Vamos a ver por qué.
El pepino está compuesto por un 95% de agua. Por lo tanto, su aporte calórico es bastante bajo: ¡10 calorías por cada 100 g! Casi no contiene carbohidratos y no tiene grasas.
Por lo tanto, el pepino es un suplemento dietético de elección, ya que ayuda a los perros con sobrepeso a perder el exceso de grasa, a los perros atléticos a mantenerse hidratados y a los perros diabéticos a ser recompensados con una golosina ocasional.
A pesar de su bajo aporte calórico, el pepino proporciona sensación de saciedad, ¡lo que lo convierte en un excelente suplemento dietético!
Si el pepino se incluye en una dieta equilibrada, satisfará las necesidades nutricionales de su perro, siempre que no supere los 25-200 g por kilo de peso al día; la ingesta de verduras no debe superar el 10% de la comida.
Las vitaminas estimulan el sistema inmunitario y mantienen el pelo y las uñas.
El pepino contiene vitamina C y vitamina K. La vitamina C le da a tu perro nueva energía e incluso protege sus articulaciones, especialmente si tu perro sufre de artrosis o sobrepeso. La vitamina K, por otro lado, mejora la fortaleza ósea y fortalece las articulaciones.
Estas vitaminas también protegen contra los radicales libres, combatiendo así el riesgo de cáncer, osteoartritis, enfermedades cardíacas e inflamación.
Al igual que el calabacín, el pepino es una excelente manera de mantener a tu perro hidratado. Es rico en minerales, especialmente en potasio, que mantiene la masa muscular de Medor.
El pepino está compuesto de componentes fitoquímicos que combaten las bacterias que causan el mal aliento.
Sin embargo, tenga cuidado de no descuidar el cepillado regular de los dientes para mantener una buena higiene bucal: ¡el buen aliento no lo es todo!
Gracias a sus beneficios, el pepino es, por lo tanto, un gran regalo para tu perro. Sin embargo, es mejor seguir algunas recomendaciones antes de administrarlos.
En primer lugar, respete las cantidades para mantener el peso ideal de su perro: su dieta, basada en croquetas o paté, debe ser equilibrada.
Se considera que las verduras deben constituir el 10% de la comida de tu perro, ten cuidado de no sobrepasar esta cantidad, ya que si bien el pepino no es peligroso, puede provocar trastornos digestivos.
También recuerde variar la dieta: alterne el pepino y otras verduras; le recomendamos cambiarlas por calabacín y judías verdes de vez en cuando.
¡No le des pepino sazonado! Algunos ingredientes de las salsas pueden ser tóxicos: este es el caso del ajo, la cebolla y algunos aceites a base de frutos secos. Además, evita la sal, que puede provocar intoxicaciones si tu perro ha ingerido demasiado.
Prefiera siempre el pepino fresco y simple, orgánico si es posible.
Para darle un poco de pepino a tu perro, recuerda pelarle la piel para eliminar los residuos de pesticidas. Luego córtelo en trozos pequeños: esto eliminará el riesgo de asfixia.
Por último, puedes mezclar trozos de pepino en las comidas de Medor: esto lo refrescará y le dará una sensación de saciedad.